el agua
Con los brazos extendidos, dijo: "Vamos, ven. Así, despacio." Si en ese momento hubiera podido pedir un deseo, hubiera sido caerme sobre él a cámara lenta. Darle un beso largo y acuático. Llevaba unos días pensando en lo cansada que estoy de pedirme paciencia. Hace mucho que nadie me besa con los ojos cerrados. Todo es tan aburrido. Y ahora es un problema porque ya no me apetece salir a pasármelo bien. Ahora lo que quiero es que me besen con los ojos cerrados. Y pueden invitarte a una copa, decirte lo guapa que eres, mirarte a los ojos, pero nunca te besarían con los ojos cerrados. Porque en el fondo son sinceros. No como yo. Pero a él no le hubiera mentido. Hubiera sido de verdad. Le miré dos segundos pero él no me vio. Yo tenía agua en los oídos, es una de las sensaciones más desagradables que conozco. Así que a los cinco minutos me marché, sin mirarle más, con el pelo mojado y los labios secos.
1 comentario:
jajajaj sabes qué, me has hexo recordar el otro día que fuí a nadar a la piscina y había un tío super cañón jiji yo también le hubiera dado un super beso acuático :D ké guay el rollito del agua no? jijiiji me ha dao la inspiración, alomejor yo tb escribo algo sobre akel día, ains! lástima que no tenga manera de conocerlo, al menos de momento, quién sabe, quién sabe... pero es que era muy morboso pq no le veía los ojos y casi tampoco la cara, claro ya sabes, con el gorro y las gafas de bucear, pero se le veían las mandíbulas marcadas de machoman y un cuerpazo de escándalo, encima ahora ke estoy en epoca de escasez jiji ain ke malita me pongo en natación
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